Si no se cuida correctamente los búlgaros también conocidos como tibicos o kéfir pueden morir o bajar la calidad de nutrientes. Te decimos como saber si los búlgaros ya no sirven y que hacer para recuperarlos.
La verdad es que no se necesita ser un experto en crianza de búlgaros para saber cómo como reproducirlos, o por lo menos para que no se nos mueran. Con unos simples pasos podremos saber si los búlgaros están muertos o aun sirven.
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¿Cómo son los tibicos?
A grandes rasgos, los búlgaros también llamados hongos del Tíbet o tibicos son la unión de varios microorganismos, tanto de levaduras y bacterias benéficas, que originan una bebida muy nutritiva y saludable para diversas enfermedades del cuerpo, tales como reducir el colesterol, artritis, dolor de cabeza, da energía y vitalidad y se le atribuye el secreto de la longevidad.
Estos hongos del Tíbet tienen una consistencia de masa gelatinosa, de forma como la coliflor, palomitas de maíz o a granos unidos de arroz, su color es blancuzco o relativamente transparente.
Su medio de vida es el agua azucarada (azúcar morena o panela) que al paso de un día entero o más tiempo produce un ligero vinagre (como “tepache”) que resulta muy benéfico para el humano.
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Como puedo saber si los búlgaros están muertos
Mucha gente empiezan a dudar si los búlgaros que tiene están sanos, por que los ven diferentes o raros. Pero tampoco tienen la seguridad de que estén muertos. Por esta razón te presentamos como saber si los búlgaros ya no sirven o se echaron a perder con métodos fáciles.
Existen diversas evidencias físicas que pueden demostrar que los búlgaros se encuentran en mal estado y no debes consumirlo.
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Textura de los tibicos:
La textura como cualquier otra característica física de los búlgaros, dependerá del tipo de azúcar y o leche (entera, deslactosada, light) que se les agregue. Por lo que puede variar un poco su apariencia. No obstante, la consistencia normal de los nódulos de búlgaros debe de ser media gelatinosa, suave y elástica, aunque un poco fangosa.
Si se deshacen al tocarlo, o por el contrario son bastan duros. Es una señal de que los búlgaros están descompuestos y lo mejor sería cambiarlos por unos de mejor calidad.
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Color:
Dependiendo del medio (leche o agua) y la cantidad de nutrientes, los gránulos pueden variar de color de trasparente a blancuzco.
Y todos aquellos gránulos que observemos un tono distinto al blanco o transparente. Hablemos de un color amarillo, verde, marrón, rosado, etc. Deberán retirarse del resto de nódulos de tibicos de nuestra bebida. Si todos los gránulos han cambiado su coloración, será una señal de que el kéfir ya no sirve y no es apto para el consumo.
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Olor:
Otra manera de cómo saber si los búlgaros ya no sirven es por su olor. Y es que si los gránulos se han descompuesto se desprenderá un desagradable olor fuerte a rancio. De este modo, te resultará más fácil percatarte de que no está en buenas condiciones.
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Mala Consistencia de la bebida
Otro síntoma evidente de que el kéfir está malo es una consistencia rara en la leche o agua utilizada, pudiendo observarse diversos detalles como: mucha espuma, o apariencia de leche cortada o muy aguada. Si esto ocurre es muy probable que parte de su cultivo no sea apto para consumo.
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Tamaño de los tibicos
Muchas personas se espantan cuando ven que sus búlgaros son muy pequeños parecidos a granos de arroz, no obstante, esto es completamente normal. Y no se trata de otro tipo de búlgaros, simplemente el tamaño depende de los nutrimentos de la leche o agua que se les coloque.
Así que el tamaño no significa que los tibicos estén descompuestos o muertos. Solo que los nutrimentos y las cantidades que absorben son diferentes. Es común que los búlgaros pequeños sean porque necesitan un poco más de panela o leche, según lo que se le añada.
Búlgaros que flotan ¿bueno o malo?
Otra duda muy común es saber si los búlgaros que flotan aun sirven. Esto es completamente normal. Y no indica ningún nivel de descomposición. Los tíbicos simplemente flotan porque están en proceso de maduración y a su vez poseen cápsulas de aire dentro de su estructura.
Si observamos detalladamente, cuando los tíbicos están flotando, nos encontraremos con una burbuja muy pequeña que está dentro de la partícula. Eso significa que está maduración y que el hongo en sí mismo está vivo.
¿Qué hacer si los tibicos se me echaron a perder?
Si observamos en nuestro cultivo de búlgaros una o más señales de descomposición lo ideal sería cambiarlo por búlgaros sanos. Ya sea que se consigan en alguna tienda especializada, Internet o con algún familiar. Y volver a empezar a crear nuevos cultivos de tibicos con mucho más cuidado para que no se echen a perder. Puedes dirigirte al siguiente enlace para conocer todos los cuidados que debe de tener al criar búlgaros.
Otra opción sería seleccionar de nuestro cultivo descompuesto, los búlgaros que se observen más grandes y blancos y separarlos en un nuevo traste de plástico o de cristal. Luego echarles agua con la misma concentración de panela o piloncillo que el medio de cultivo normal o leche. Aunque los primeros ciclos del kéfir se tengan que desechar, hasta que veamos que el color y vigor vayan normalizándose.
Contradicciones y Efectos secundarios de tomar tibicos
Se dice que la forma en que los búlgaros actúan sobre nuestro cuerpo es regulando el pH de casi todo el sistema digestivo (estomago e intestinos) eliminando y bloqueando el crecimiento de bacterias patógenas que dañan nuestro cuerpo, fortaleciendo y aliviando diversas enfermedades y síntomas que nos aquejan.
No obstante, no todo es miel sobre hojuelas. También existen efectos adversos que podemos sufrir al consumir esta bebida, debido a varias razones, por lo que se recomienda su consumo nulo o limitado para:
- Personas con diabetes
Por ser microorganismos que se nutren de azucares en su cultivo tradicional, están contraindicados para el consumo por diabéticos.
- Personas que sufran problemas estomacales
En personas con gastritis y/o úlceras, los tíbicos pueden provocar malestares al comenzar el tratamiento, sin embargo, su uso prolongado mejora los malestares a través de la limpieza del sistema digestivo y cicatrización de heridas internas.
Es muy importante en personas con estos problemas empezar el tratamiento con dosis pequeñas. Consumiendo medio vaso de líquido de hongos al día. Una vez se vea un alivio de malestares se puede aumentar el consumo a un vaso completo al día.
- Bebes y niños
No es recomendable el consumo de tibicos por parte de infantes menores de 14 años.
- Mujeres embarazadas o en lactancia
Donde comprar el kéfir
Los nódulos de kéfir suelen pasarse de mano en mano, ya que crecen indefinidamente. Pero también hay quienes proveen nódulos deshidratados. Estos puedes conseguirlos en distintos establecimientos naturistas o especializados, o mediante algún familiar, conocido o bien, por Internet.
Si tienes mas dudas sobre como saber si los búlgaros ya no sirven o están muertos, deja tus comentarios y entre todos podremos ayudarnos. Mucha suerte y disfruta tu bebida nutritiva y saludable para nuestro cuerpo.
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